Buenos Aires es la capital de la República
Argentina y encontrarás en ella una multiplicidad de atractivos urbanos, históricos y culturales para visitar. Podrás organizar todas las actividades que deseas, sea cual sea la cantidad de días de los que dispongas para alojarte en
Buenos Aires.
En todos los sectores de la ciudad encontrarás museos orientados a mostrar las principales facetas o aspectos de la sociedad y la cultura de la ciudad y el país a través de los tiempos. Un buen ejemplo de esta afirmación es el Museo Tecnológico Eduardo Latzina, ubicado en la Escuela Industrial Otto Krause, más precisamente en la calle Paseo Colón 650.
En las diferentes salas que conforman este museo se conservan diferentes ensayos, mecanismos y arquetipos para que los alumnos de la escuela en que funciona, así como todos los visitantes, puedan interactuar directamente con los que se consideran los principales avances de la ciencia a lo largo del tiempo. El objetivo principal que guió la apertura de este museo fue justamente que la enseñanza de los desarrollos de la técnica puedan ser realizados de manera activa, acompañada de la práctica a través de modelos.
Una vez que llegues edificio encontrarás tres plantas para recorrer, que abarcan en total más de mil metros cuadrados. Comenzando tu recorrido por la planta baja encontrarás la Sala Histórica, que guarda fotos históricas, junto a los antecedentes, trofeos y trabajos especiales realizados a lo largo del tiempo en el museo. También en el mismo sector se ubica la Sala de Máquinas, en la cual se exhiben modelos en escala de herramientas utilizadas para labrar metales y realizar trabajos sobre madera; y más adelante se halla la Sala de Calderas, el sector de hornos para crisoles y fundición y finalmente, un salón central de recepción.
Subiendo las escaleras te encontrarás con los atractivos quizás más interesantes para el público, ya que en la planta entrepiso se encuentra la Sala Da Vinci. En este sector podrás admirar reproducciones de las obras de este reconocido e histórico inventor, además de maquetas de diferentes tipos de turbinas y bombas. Finalmente, también se ubica una sala correspondiente a un Archivo Histórico.
Entre las dependencias del museo también se encentra un subsuelo, en el que se ubican una sala destinada a las Ciencias Naturales, un Auditorio para la realización de reuniones y conferencias, una biblioteca, la sala de video y el Archivo Histórico. Aquí también podrás entretenerte con otro de los puntos de interés destacado del museo, que lo constituye una galería con fuente de agua, acompañada por espectáculo de luz y sonido. Todo el sistema está controlado por computadora y es obra de los alumnos de la escuela Otto Krause, estudiantes de la especialidad en Electrónica.
Si eres amante de la ciencia y la tecnología, en este museo encontrarás una amplia variedad de colecciones que seguramente colmarán tu interés. Una de ellas es la Colección de Cuchillería Sheffield, de Inglaterra, que fue donada como muestra de agradecimiento por Eduardo de Windsor, el entonces Príncipe de Gales durante una visita a la Escuela Industrial de la Nación en 1925.
Podrás admirar un completo conjunto de cuchillos, cucharas, tenedores, navajas, hojas de afeitar, chairas, tijeras y destapadores, entre otros muchos objetos, que fueron fabricadas por las principales platerías que existían en esas épocas en el Reino Unido. Todas las piezas están fabricadas en plata princesa y esterlina, acero inoxidable y peltre. Un aspecto destacado son los mangos y guarniciones de las piezas, elaborados con cuero, madero, asta y hueso.
En la Sala Da Vinci ubicada en el entrepiso podrás disfrutar y entretenerte con toda la colección destinada a recordar y mantener vigente la obra de este genial inventor. En las dependencias de la sala podrás admirar una reproducción de su autorretrato que lo refleja en su vejez. Está realizado en carbonilla y muestra cómo se veía a sí mismo este gran escultor, pintor, mecánico, músico, anatomista y pensador que se destacó durante el Renacimiento por sus ideas e inventos revolucionarios.
En la sala especialmente dedicada a su obra se exponen varios modelos de sus inventos técnicos, que son reproducciones llevadas a cabo en Milán en la década de 1940. En aquel entonces más de un centenar de científicos se propuso recrear los principales inventos para que fueran exhibidos en el Palacio de Arte de esa ciudad italiana. Luego los modelos recorrieron varias ciudades del mundo para que fueran apreciados por la mayor cantidad de público posible.
En la década del ’60, el Museo
Tecnológico de la ciudad de
Buenos Aires recibió como donación de la Embajada de Italia algunas de esas reproducciones, que son las que hoy puedes apreciar y conocer durante tu visita. Entre ellas se halla una herramienta bélica – un cañón de bocas múltiples dotado de 33 caños-, que tiene la capacidad de eyectar simultáneamente tres cargas de municiones con 11 tiros consecutivos. Fue esta invención de Leonardo el antecedente del desarrollo de la ametralladora.
María Luz Sallietti